El mobiliario para comercio de confección que permite todas las variaciones que nos exigen las diferentes temporadas, por tamaños, presentaciones, etc. lo encontramos con las columnas desplazadas, troqueladas en altura. El sistema nos facilita cambios de niveles o accesorios sin necesidad de herrajes. Tanto las barras de confección, como los estantes pueden intercalarse o combinarlos según la necesidad del momento. El espacio que nos ocupa el mobiliario es el mínimo, optimizando los murales con máxima capacidad de prendas. En este caso las cremalleras las ofrecemos con moldura de madera, armonizado con el resto de la decoración del comercio. La calidez de colores de las estanterías, suelo y paredes es relajante, a la vez que su carácter neutro hará destacar las prendas expuestas. Cada temporada ofrece modelos de ropa de colores, tamaños y características diversas que necesitan ser presentadas de forma especial. El mobiliario de la tienda ha de ser móvil en la composición de los murales para que este se adapte a cada momento y necesidad. También es recomendable ir cambiando las exposiciones para dinamizar el comercio. Necesitamos para ello un mobiliario comercial flexible y funcional. Las estructuras fijas nos limitan y no permiten desarrollar estrategias comerciales que potencien las ventas. En la tienda de confección, en los murales, el mobiliario que se precisa es, básicamente, estantes para prendas dobladas o complementos como por ejemplo bolsos o calzado y barras de confección para las prendas colgadas. Para mostrar la ropa frontalmente disponemos de los brazos rectos a pared o inclinados. Con estos últimos hemos de tener en cuenta que el espacio que ocupan con el género puesto es mayor. Recomendamos los brazos rectos por ser más cómodos para el cliente a la hora de coger la percha. Combinar diferentes estilos es un recurso muy útil para que nuestro espacio no sea monótono e incluso con ello facilitamos el encuadre de las diferentes secciones. Una mesa de época, restaurada convenientemente y colocada en un punto caliente del local nos servirá para potenciar las ventas de los artículos que nos interese. Los visuales con la información de precios y características del producto han de formar parte del conjunto. Imágenes de nuestras firmas también completan la decoración general y dan corporativismo al conjunto.
MOBILIARIO PARA TIENDA DE ROPA
PANEL CREMALLERA OCULTA
El sistema de panelado con cremallera oculta está muy aceptado en la decoración comercial. Combinándolo con otros sistemas o como decoración exclusiva este sistema aporta todas las funciones necesarias para retail marketing actual. Múltiples complementos del sistema nos permiten la exposición de las prendas con el objetivo de facilitar la comodidad para el cliente y la mejor visualización del producto. Crear espacios delimitados con murales de cremallera oculta define las colecciones y aporta orden al conjunto. La propuesta de la casi invisibilidad de la cremallera consigue integrar los estantes y las barras en el mobiliario con las mismas ventajas de los sistemas donde las columnas o cremalleras son visibles totalmente. En algunas ocasiones el panelado cumple una doble función: la de respaldo puramente decorativo y como separación o aislante de una pared en malas condiciones. Esta circunstancia puede ahorrarnos la necesidad de tener que hacer obras molestas y ocuparnos más tiempo del que deseamos. La instalación del panel con cremallera oculta se realiza en muy poco tiempo, pues la estructura está diseñada para un montaje sencillo. El equipamiento comercial mediante panel con cremallera oculta está diseñado para comercio de confección y complementos, con accesorios múltiples como estantes, barras de confección, brazos rectos, barras portoras para ganchos, o estantes pequeños para calzado y complementos. La medias que podemos fabricar se adaptan al cliente y sus necesidades, tanto en alturas como en anchuras. La gama de colores en la madera y metal es muy extensa para definir la imagen corportativa y exclusiva de nuestros clientes.
Alternancia de cremallera con panel oculto y casilleros. las barras de confección para prendas colgadas y los estantes para prendas dobladas. Los módulos son de 60 cm para poder disponer de más movilidad con los elementos del mobiliario.
Construcción asimétrica del sistema de paneldo con cremallera oculta. Los accesorios del sistema pueden combinarse entre los diferentes módulos al ser de la misma medida todos ellos.
Queremos ahuyentar la mala suerte “tocando madera” ahora y desde hace miles de años y el caso es que cada día tenemos menos madera a mano. Y es que de una forma u otra el plástico aparece en nuestras vidas para sustituir a la madera.
En nuestras casas y en los comercios el mobiliario generalmente es de melanina. La melanina es el revestimiento plástico de los tableros de aglomerado que se emplearán en la fabricación de muebles. Estos tableros han tenido mucho éxito por sus características de dureza, durabilidad, resistencia al calor, resistencia al ataque de parásitos, y sobre todo por ser un material económico en comparación a la madera natural. El tablero de aglomerado como subproducto del proceso de aserrado de la madera favorece al máximo el aprovechamiento de este material noble y contribuye a la sostenibilidad de la gestión de nuestros bosques por parte de la industria maderera.
En la industria hemos visto palets de plástico para sustituir al clásico de madera. La fabricación mediante la inyección de plástico nos da productos muy baratos a corto plazo si no valoramos el coste medio ambiental. En defensa del palet de madera hemos de decir que para el transporte ofrece una gran resistencia además de disponer de capacidad bactericida, fundamental para el sector alimentario, que no disponen otros materiales. También su proceso requiere menos consumo de agua y energía imprescindible en la batalla al cambio climático.
La nueva cultura del “usar y tirar” provocan el consumo feroz, la no consciencia de la durabilidad de las cosas y el menosprecio al producto artesanal hecho con nuestras manos.
Hemos aprendido que cambiar una prenda de ropa por otra nueva es curiosamente barato y rápido y con esta acción no pensamos que nos han enseñado a consumir para enriquecer a la gran industria textil. Compramos barato porque el producto es de baja calidad, pero caro para el medio ambiente.
En el sector del comercio, cuando una tienda de ropa ha de colgar sus prendas pensará seguramente en perchas de plástico, más económicas e igualmente funcionales que las de madera. Y seguramente no valoraremos el tiempo que queremos que nos sean útiles.
El valor del trabajo manual, del producto de cercanía, del uso de materias nobles, a medio plazo nos favorece a todos.
Cuando vemos trabajar la madera, lo que puede ser una producción en serie se convierte, aun así, en algo artístico pues ya es un arte ser capaz de transformar un trozo de madera en una pieza de uso cotidiano. El corte, el pulido, el lacado, todo pieza a pieza con cuidado y cariño solo lo consiguen las manos humanas con experiencia.
Queremos valorar y destacar el trabajo de tornería en la madera de nuestras perchas de pie para escaparate. Las perchas de pie, perchas infantiles, hechas una a una, con profesionalidad y esmero, puestas en nuestras vitrinas darán calidez a las exposiciones y sentido de durabilidad.
Un elemento en el mobiliario para comercio que necesita una atención especial es el mostrador. Tanto para mostrar nuestros productos y hacer de la venta asistida un momento positivo para el cliente que se sentirá cómodo y receptivo a nuestras explicaciones, así como para el cobro que supone el final de la visita del cliente y su estancia en nuestro comercio, hemos dar importancia y diseñar el mostrador en función de nuestros objetivos.
La medida del mostrador estará condicionada por el espacio disponible de nuestro local comercial, pero también del uso que hagamos o necesitemos. La tendencia del momento requiere mostradores pequeños para hacer la circulación de los usuarios libre y no condicionada. La venta es cada vez con mayor frecuencia autónoma por lo que el vendedor ha de dejar que sea el cliente el que reclame su atención. Por otro lado si se precisa, según el sector, mostrar, informar, empaquetar, etc. el mostrador deberá reunir las condiciones de medida adecuadas que lo permitan con comodidad. Pensemos además qué elementos estarán presentes en el mostrador: TPV, porta celos, porta bobinas de papel de regalo, ordenador o caja registradora, pequeños expositores, etc.
En cuanto a las medidas un valor importante es la altura del mostrador. Ergonómicamente la altura ha de permitir que nuestra espalda y la del cliente no adopte posturas incomodas. Así si hemos de escribir sobre el mostrador podemos recomendar alturas de 1 m. Si el caso es mostrar o empaquetar con 90 cm podemos trabajar perfectamente.
La ubicación del mostrador en el local comercial es fundamental para que no sea un obstáculo o freno para que los clientes entren en la tienda. Muy cerca de la puerta de entrada, cuando se puede evitar, será una barrera que incomodará al visitante. Buscar puntos fríos es idóneo para situar el mostrador ya que el comprador buscará inevitablemente al vendedor si lo necesita. Si colocamos el mostrador en la zona central de la tienda puede simplificar el control general del comercio.
Todas las prendas de ropa bien etiquetadas parra el control del producto es fundamental para el comerciante. Las etiquetas con el precio es información para el cliente que agradece para evitar la intervención constante del vendedor.
Cuando hemos de etiquetar la ropa en general se utiliza el hilo de nylon o navet que es de donde colgará la etiqueta de cartulina. Esta última puede ser anónima, con un diseño universal, o bien puede ser una etiqueta hecha especialmente para nuestro comercio. Cuando no queremos destinar mucho presupuesto a este fin recomendamos las etiquetas estándar polivalentes. Estas también son útiles cuando hemos de reponer etiquetas del fabricante que se han caído, o roto. Estas etiquetas se suministran en pequeñas cantidades que no supone un gran desembolso para el comerciante. El diseño de estas etiquetas está pensado para encajar en todo tipo de comercio de confección. Con colores visos, con diseños kraft, todas ellas van troqueladas con la medida justa que permite el pase del navet y quede perfectamente sujeta.
Para la elección del navet hemos de tener en cuenta tanto la medida de largo como el tipo de máquina naveteadora que disponemos o queremos adquirir.
Primeramente hemos de seleccionar la naveteadora que nos interesa. Disponemos en el mercado de la naveteadora aguja fina y la naveteadora aguja estándar. Para prendas delicadas, como lencería, corsetería es recomendable la naveteadora de aguja fina, para evitar cualquier daño a la prenda. Cuando se trata de confección podemos utilizar la naveteadora de aguja estándar, teniendo en cuenta en colocar el navet siempre en costuras o zonas que no perjudique el producto.
Los navets han de ser específicos para cada una de estas máquinas, esto es: la etiquetadora de aguja estándar precisa de navet estándar; la etiquetadora de aguja fina únicamente funcionará con navets finos.
El largo del navet está en función del tamaño del artículo a etiquetar. Disponibles desde 7 mm hasta 50 mm, según el grosor del navet, podemos escoger el más adecuado. Para calzado, cinturones podemos elegir el más corto. Para lencería es recomendable el de 25 mm y para ropa en general de 35 a 50 mm.
Consideremos además la frecuencia que etiquetaremos para elegir una máquina más o menos económica. Recomendamos naveteadoras Arrow cuando este trabajo es muy habitual. Todos los modelos disponen de agujas de recambio para cuando se precisan.
El uso de las naveteadoras no necesita un trato especial. Hemos de evitar las caídas que suelen estropear las agujas, y seguir las instrucciones para extraer correctamente la tira de navets cuando hemos terminado de etiquetar porque esto puede causar daños interiores en la máquina.
Propuestas, para escaparate de moda infantil, acordes con la agilidad que precisa el comercio de hoy en día, las que ofrecemos para simplificar el montaje y desmontaje en la vitrina: Las perchas de pie, en todos los modelos, se combinan perfectamente con otros elementos decorativos, y son por su estructura fáciles de usar. Las prendas se colocan en las perchas y se presentan de manera que con poco tiempo componemos un escaparate dinámico y atractivo.
Es importante para conectar con el cliente construir de forma temática el escaparate. Según la temporada o la campaña encontraremos un motivo destacable que armonice con las prendas de ropa que coloquemos. En primavera la decoración es colorista, alegre con motivos florales, los colores vivos y luminosos. Las prendas más livianas se exponen en las perchas de pie dándoles protagonismo.
En verano con la campaña de rebajas la imaginación da libertad de componer como queramos el escaparate, todo está permitido. Desde un escaparate vacío a todo a rebosar. Pero imprescindible rotulado de forma destacada y a gran tamaño, todos los descuentos que aplicaremos. También en este momento los soportes de escaparate como las perchas, que ocupan muy poco espacio, nos ayudaran a colocar todos los modelos que queramos.
En otoño, la “vuelta al cole” es un recurrente que funciona. Los colores ocres, marrones, con hojas de vid por ejemplo, nos acercan a la naturaleza. Dispondremos de las perchas con pinzas para dos prendas, disponibles en todas las tallas infantiles. Los soportes graduables en altura permiten exponer prendas más pesadas para el tiempo frio.
En invierno, cuando empieza la campaña navideña, podemos lucirnos con decoración específica, que encontraremos fácilmente. Los colores verdes con rojos y oro, los conjuntos con azules, blancos y plata crearan un ambiente especial a la composición. Los muñecos con movimiento automatizado son una atracción indispensable. La iluminación también es especial para esta campaña. Cuando compongamos grupos, diferenciándolos en el espacio del escaparate, podemos alternar las perchas de pie con maniquíes.
Entre las campaña marcadas por las estaciones del año existen múltiples ocasiones que propician un escaparate especial. Nos hemos de aprovechar de estas fechas para resaltar y promover nuestro escaparate. Para la creación del escaparate de moda infantil se puede además encontrar muchas sugerencias en tendencias que detectemos en nuestro entorno. Es importante seguirlas para ofrecer un interés no solo a los adultos sino también a los niños.
El escaparate precisa de elementos móviles que podamos cambiar según convenga pero ha de disponer de una base fija desde donde partamos para nuestras creaciones. La tarima que delimite el espacio del escaparate nos marca el escenario. Los soportes como las perchas de pie, maniquíes, etc., los iremos alternando y combinando para exponer las prendas de ropa. Bucks de diferentes medidas para utilizar como pódiums y formar alturas. Las mallas también se usan como límite o como biombo, incluso en el techo para colgar decoración o iluminación. Después se aconseja hacer un croquis, partiendo de un tema, donde coloquemos cada uno de estos elementos armoniosamente, creando un lenguaje comprensible para el observador. Adaptemos nuevas ideas a las composiciones básicas de pirámide, en grupos, lineales, en “S”, etc.
Con estas fórmulas simples hacer el escaparate será gratificante y productivo.