Creado: 10 Septiembre 2019
Un elemento en el
mobiliario para comercio que necesita una atención especial es el
mostrador. Tanto para mostrar nuestros productos y hacer de la venta asistida un momento positivo para el cliente que se sentirá cómodo y receptivo a nuestras explicaciones, así como para el cobro que supone el final de la visita del cliente y su estancia en nuestro comercio, hemos dar importancia y diseñar el mostrador en función de nuestros objetivos.
La medida del
mostrador estará condicionada por el espacio disponible de nuestro local comercial, pero también del uso que hagamos o necesitemos. La tendencia del momento requiere mostradores pequeños para hacer la circulación de los usuarios libre y no condicionada. La venta es cada vez con mayor frecuencia autónoma por lo que el vendedor ha de dejar que sea el cliente el que reclame su atención. Por otro lado si se precisa, según el sector, mostrar, informar, empaquetar, etc. el mostrador deberá reunir las condiciones de medida adecuadas que lo permitan con comodidad. Pensemos además qué elementos estarán presentes en el mostrador: TPV, porta celos, porta bobinas de papel de regalo, ordenador o caja registradora, pequeños expositores, etc.
En cuanto a las medidas un valor importante es la altura del mostrador. Ergonómicamente la altura ha de permitir que nuestra espalda y la del cliente no adopte posturas incomodas. Así si hemos de escribir sobre el mostrador podemos recomendar alturas de 1 m. Si el caso es mostrar o empaquetar con 90 cm podemos trabajar perfectamente.
La ubicación del mostrador en el local comercial es fundamental para que no sea un obstáculo o freno para que los clientes entren en la tienda. Muy cerca de la puerta de entrada, cuando se puede evitar, será una barrera que incomodará al visitante. Buscar puntos fríos es idóneo para situar el mostrador ya que el comprador buscará inevitablemente al vendedor si lo necesita. Si colocamos el mostrador en la zona central de la tienda puede simplificar el control general del comercio.
Los colores del mostrador estarán en consonancia con el resto del mobiliario comercial aunque su diseño puede romper con el resto al ser este un elemento independiente y con importancia suficiente para ser tratado individualmente. Vinilos con el logo, iluminación indirecta, vitrinas complementaria, diferenciaran nuestro mostrador.
La zona donde ubicaremos el mostrador también precisa un trato especial. La parte trasera es muy importante y de ella podemos servirnos para presentar artículos especiales que necesitan asistencia e información. Si queremos potencial el diseño, nuestro logo, una pantalla para visualizar nuestra firma y sus productos, o imágenes de gran formato, nos ayudaran a dar carácter a nuestro negocio.
Tanto el mostrador clásico recto, como un doble servicio, en forma de U para cerrar el paso, el mostrador ha de concebirse para la comodidad del que atiende y del cliente.